Páginas

jueves, 27 de junio de 2013

Esperanzas, ¿para qué os quiero?

¿Por qué sigo esperando que alguien oiga mi voz?

¿Por qué sigo esperando algo de vosotros?

¿Por qué?

A nadie le importan los problemas de nadie, no más que ellos mismos, ni siquiera quienes te aman.

El interés se acaba, la atención se muere, ¿por qué espero que sea inmutable un trozo de plastilina, confundiéndolo con un diamante?

Os cambio mi corazón de hielo por una carcasa de acero para ocultar mis emociones. ¿Os hace?

Porque yo, sinceramente, estoy harta de que trafiquen con él.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡No matemos a los árboles!